Ante el claro incremento de la actividad solar en estas semanas la
Asociación Española de Protección Civil para los Eventos Climáticos
Severos está difundiendo ahora, de forma resumida, estas diez sencillas
recomendaciones ante la hipotesis de una tormenta solar extrema que,
finalmente, pudiese teóricamente producirse, un "Black Swan" o
multi-escenario "imposible", como señala la asociación.
Las siguientes 10 recomendaciones se basan en las buenas prácticas y
recomendaciones de FEMA y NASA para la prevención de emergencias, en el
simulacro atlántico de tormenta solar EEUU-Comisión Europea, en el
informe de la OCDE "Geomagnetic Storm" y en el reciente informe del
Comando Norte del Ejército americano "IN THE DARK.: Military Planning
for a Catastrophic Critical Infrastructure Event" ("En la oscuridad:
planificación militar para caso de un evento catastrófico para las
infraestructuras críticas").
1- Verificar con calma la concreta situación que nos afecta.
Ante todo conservar la calma y proceder con tranquilidad a verificar
que realmente se ha producido de un apagón generalizado a todos los
niveles (4 factores de comprobación: a- electricidad doméstica,
b-telefonía móvil, c-emisoras de radio y d- internet) y no de una
interrupción puntual por otra causa distinta, como un apagón normal de
corriente doméstica en el barrio que no afectará, por ejemplo, al
funcionamiento normal de la telefonía móvil o las antenas de radio; o un
problema técnico de tu operadora móvil que no afectará, por tanto, a la
iluminación de tu cocina...etc.
Una tormenta solar, incluso una severa, no tiene por qué dar lugar
necesariametne a ningún "colapso" y, de hecho, puede limitarse a dar
lugar a otros efectos perjudiciales pero "menores" para nosotros, en
tanto que sin apenas consecuencias directas en nuestro día a día (como
apagones de radio, o afectación de algún satélite).
Afortunadamente nuestra atmósfera y magnetosfera nos protegen las 24
horas del día. Lo vienen haciendo de forma efectiva desde siempre.
De hecho, puede que incluso de haberse producido un efecto
electromagnético realmente severo que consiga alcanzar la superficie de
la tierra y hasta produzca alguna distorsión en sistemas eléctricos éste
se produzca en latitudes mucho más al norte de nuestro país.
O que incluso de llegar a afectarnos, cosa nada fácil, tan sólo
afecte alguna región localizada de nuestra redes de gran distribución y
transformadores y que el resto de la red no se vea afectada en cascada
tampoco. Esto es exáctamente lo que sucedió, por ejemplo, con la
conocida tormenta geomagnética de Quebec, Canadá, en 1989, que es cierto
que dejó sin fluido eléctrico hasta a 6 millones de personas durante
casi 24 horas, pero no afectó al resto del país desde dónde fue
movilizada de inmediato toda la asistencia necesaria a la población y
todos los medios necesarios para la reparación de la red dañada.
En definitiva: incluso con una tormenta geomagnética severa la
situación y afectación de las infraestructuras fundamentales de las que
dependemos puede variar dependiendo de la combinación de muy distintos
factores geomagnéticos, y es necesario determinar con toda serenidad, y
certeza, el concreto escenario en el que nos vemos inmersos.
2- Plan familiar preestablecido.
De modo que permanecer tranquilamente en casa a la espera de
asistencia exterior - o valorar que ésta no llegará a corto plazo- será
nuestra primera decisión familiar para gestionar esta situación.
Para ello, en primer lugar, y en toda circunstancia, hay que
sintonizar la radio y seguir al tanto de las noticias que puedan llegar
así como de las indicaciones de las autoridades y Protección Civil, que
en caso de emergencias estarán en todas las frecuencias.
Como pauta general, si tras las primeras 72 horas tras el evento no
hay signos de recuperación - no llega asistencia alguna, ni hay noticias
por radio/internet ni nadie sabe nada con certeza -, significa que el
impacto en las infraestructuras nacionales ha podido ser severo y de
amplio alcance geográfico (indeterminado, en todo caso) y es
recomendable reunir a nuestros familiares y dirigirse hacia alguna zona
menos poblada y más al sur, donde la red ha podido resistir mejor.
En particular, si además de a esos 4 factores de comprobación
aludidos se ha afectado, adicionalmente, a nuestros vehículos y otros
aparatos electrónicos independientes de la red, como baterías de
portátiles, o transistores a pilas hay que entender que el carácter del
pulso electromagnético natural (EMP) asociado al evento habrá sido
particularmente severo. No estaríamos entonces ante ningún escenario
como el de Quebec en 1989 y en ese caso mejor partir lo antes posible.
De todas formas algo así nunca se ha verificado, y que algo de tal
alcance pudiese suceder por el momento sólo es una teorización.
Y si se vive en las inmediaciones de una infraestructura crítica
sensible a lo que hay que estar pendiente, siempre, será a lo
establecido en su plan de emergencia y a las instrucciones de los
responsables de protección civil de la zona sobre el concreto modo de
actuar y de valorar la situación allí.
Sea como sea, si nos vemos envueltos en una situación de fallo de uno
u otro alcance, hemos de prevenir la posibilidad de que las llamadas
para contactar con otros de nuestros seres queridos puedan no
funcionarán.
Por ello lo primero necesario es tener previamente establecido es a)
un plan de comunicaciones y b) un par de sencillas pautas para la
reagrupación familiar desde el principio del escenario para, c) llegado
el caso, dirigirse a un lugar seguro familiar de referencia previamente
establecido juntos - fuera de la ciudad y a una distancia prudente de
otras instalaciones críticas sensibles -.
Es importante que el conjunto de ese plan sea “refrescado” de vez en
cuando entre los miembros de la familia y que todos sepan a donde
dirigirse para el reagrupamiento inicial y el desplazamiento posterior
de ser necesario.
Es importante que el desplazamiento hasta dicho lugar seguro se
produzca siempre con toda normalidad y observancia de las normas de
circulación. Con mucha más prudencia en realidad: hay que prestar
especial atención a cortes y obstáculos imprevistos, o semáforos y otros
elementos de señalización electrónica que han podido dejar de
funcionar.
Es importante prestar especial atención a todo lo relativo al
acompañamiento de menores, familiares con alguna discapacidad o que
requieran de alguna atención especial y ancianos de avanzada edad.
Es importante disponer de cosas como un mapa de carreteras al uso y
bicicletas por cada miembro (en portabicicletas, p. ejemplo) como medio
secundario, ya que pueden resultar de utilidad.
Es importante que para poder realizar dicho desplazamiento en
condiciones adecuadas hayamos preparado antes los recursos básicos que
nos permitan estar en unas condiciones adecuadas cuando alcancemos ese
lugar seguro familiar de destino. Por ello algunos recursos de este
decálogo los guardaremos directamente en dicho lugar seguro familiar de
destino; pero otros recursos los tendremos en casa, directamente a mano y
siempre con nosotros.
Un ejemplo sencillo de las cosas para tener siempre a mano son las
"mochilas listas para salir" recomendadas a los ciudadanos por el
programa "Prepárate Madrid" del ayuntamiento de la capital
(http://www.madrid.es/UnidadesDescentralizadas/Emergencias/PreparateMadrid/Ficheros/Preparate/despliegue_mochila.jpg
) añadiéndole algo de comida no perecedera por persona para más de 3
días y los elementos que se indican en los puntos 3 y 4 de este Decálogo
("Agua" y "Protección ante los elementos").
Simplemente con visitar alguna gran superficie comercial, alguna
cadena de tiendas deportiva/de multiaventura se pueden encontrar una
amplia variedad de posibilidades para cubrir los preparativos indicados a
continuación.
3- Agua y medios de potabilización portátiles.
Contar con una reserva de agua mineral directamente a mano y medios de potabilización.
Beber agua potable es la segunda necesidad humana después de respirar
(mínimo 1,5 litros día/persona, según actividad) , y un apagón
generalizado de estas características podría suponer semanas de
afectación mientras el flujo se reestablece.
Esto es muy importante, y debe ser la primera preparación material de
todas a adoptar a causa de la denominada regla del 3 en situaciones de
emergencia: Una persona no puede resistir más de 3 minutos sin aire, 3
días sin agua potable, ni 3 semanas sin comida.
Disponer de suficiente cantidad de agua potable y segura a mano en
función del número de personas en peligro y durante el tiempo
suficiente, es un factor crítico en cualquier emergencia. No lo podremos
subrayar lo suficiente.
Por ello, además de contar con unas garrafas de agua mineral de
reserva,directamente disponibles en el lugar seguro de reagrupación
familiar, recomendamos la adquisición de algún medio seguro de
filtración automática portatil como los “life straw” familiares, o
similar, o como una cantimplora de montaña por persona de las que
incorporan filtros potabilizadores. Métodos que resultan especialmente
seguros en tanto que no requieren ni de ningún tipo de manipulación -
más allá del simple llenado -, ni de dosificación, ni de tiempo espera,
reduciendo por tanto el riesgo de que el proceso potabilizador se haga
incorrectamente y genere un riesgo adicional para la salud.
Tales métodos de potabilización no sustituyen, en todo caso, al
sentido común de examinar adicionalmente que en las inmediaciones que el
agua que pretendemos tomar no proviene de aguas estancadas o resulta
contaminada de alguna forma con heces o animales en descomposición.
4- Protección personal ante los elementos.
Contar con un buen saco de dormir testado y esterilla por cada
miembro de la familia, ropa de abrigo (gorro, guantes, bufanda), no
sabemos si el apagón temporal puede suceder en invierno como sucedió con
la mencionada tormenta geomagnética de Quebec. Tampoco sabemos cual
podría ser su concreta duración ahora (días, semanas, meses...) lo que
hace especialmente recomendable contar con medios autónomos de
calefacción en el lugar de reagrupación familiar. La pequeña tienda de
campaña familiar habitual de excursiones y camping.
Gafas polarizadas (gafas de repuesto también si se necesitan) y un
pañuelo de tela grande de distintos usos (mascara improvisada, gorra
para el sol, prefiltro de partículas para el agua, pequeñas heridas...).
Tapones para los oidos. Botas para caminar aptas para la lluvia, así
como un poncho para la lluvia resulta así mismo especialmente
recomendado. Chandal, vaqueros y similar y mudas y calcetines de
repuesto. Algo de hilo, aguja y algunos botones no ocupan lugar.
Junto a ello otros elementos adicionales de protección personal como
algún repelente efectivo de mosquitos y otros insectos, bien sea en
spray repelente/pulsera bien algún modelo de repelente tipo colgante por
ultrasonidos de eficacia probada que protege las 24 horas del día,
habitualmente en un par de metros de radio, y de forma continuada
durante meses hasta que se agote su pila botón.
Un buen cinturón, capaz de resistir cargas y esfuerzos, puede
ofrecernos así mismo múltiples usos para asegurar/sujetar carga,
ayudarse a superar pequeños desniveles formando una cadena humana o para
evitar perdidas en condiciones meteorológicas adversas.
5- Reserva de alimentos no perecederos.
Contar con una reserva de alimentos no perecederos proporcional al
grupo familiar transportada o transportable al lugar de reagrupación.
El "EMP Act América" y la Protección Civil de Portugal han
recomendado un mínimo de 2 semanas de suministros por persona; la
Asociación Española de Protección Civil para los Eventos Climáticos
Severos recomienda que se comience por esas 2 semanas pero que se vaya
ampliando paulatinamente dicha cantidad hasta alcanzar un mínimo de 2
meses/persona como mera reserva de maniobra ante el riesgo potencial de
larga duración de la situación generada.
Hay que tomar en cuenta que, en general, las recomendaciones
tradicionales de preparación para fenómenos estándar de "72 horas" (3
días) en los que "alguien" llegará para ayudar pueden quedar muy
desfasadas ante el carácter único que pueden alcanzar eventos
excepcionales de estas características, y deben ser ampliadas.
En la selección de alimentos siempre se deberá tomar en consideración
incompatibilidades y preferencias alimenticias y partiendo de elementos
altamente nutritivos como lentejas y garbanzos cocidos, arroz y harina,
sardinas/atún en lata (siempre lata mejor que cristal, y siempre abre
fácil en lo posible); complementar con leche y patata en polvo,
pastillas de caldo, tomate natural triturado, galletas comunes, y algún
complemento alimentario como el alga "espirulina platensis" – promovida
por Naciones Unidas para situaciones de emergencia por su alto poder
nutritivo y adquirible en centros dietéticos –. Sal (de la yodada y
fluorada), aceite de oliva y miel como reguladores de ingesta cotidiana.
Especias como ajo, canela o albahaca. Abundante fruta variada en
almibar y en formato infantil de potito.
Una cucharadita diaria de cacao puede ser un antidepresivo natural y
posee distintos efectos beneficiosos; infusiones como la tila, la
manzanilla o el té son polivalentes, muy ligeras y de larga
conservación.
Lo importante, en general, es seleccionar aquellas unidades que den
de si el mayor consumo preferente posible en etiquetado y - fundamental -
llevar una pequeña libreta de control anotando fechas y cantidades. Su
almacenaje deberá ser en lugar fresco, seco y al amparo de la luz, a
poder ser en contenedores plásticos cerrados de tamaño mediano que los
proteja de insectos y que permitan su rápido manejo llegado el caso.
Otro buen complemento son los multivitaminas (con multiminerales),
siempre que su ingesta se mantenga dentro de las cantidades recomendadas
y se acompañe siempre del suficiente aporte líquido diario (sopena de
daño a los riñones). Refuerzos de vitamina C y calcio resultan en todo
caso imprescindibles ante cualquier posible escenario de larga duración.
La reserva de alimentos debe incluir piensos para nuestras mascotas, baratos y de larga duración por lo general.
Es imprescindible disponer de algún tipo de equipación de camping gas
y al menos olla/sarten/pasapuré para la preparación de alimentos y cazo
polivalente de latón y cubierto por persona.
6- Botiquín familiar ampliado.
Puesta al día del botiquín familiar siempre de conformidad a los
medicamentos aptos para los miembros de la propia familia e incorporando
cosas como algún antibiótico, antiinflamatorio, aspirinas, paracetamol,
antidiarreico, y suero oral. Algún antiestamínico genérico y abundantes
gasas estériles y yodo para desinfección. Banda adhesiva multiusos
omnifix u otra, y puntos americanos o de aproximación. Alcohol para
esterilización. Crema hidratante y bicarbonato.
Se deberá prestar nuevamente especial atención a contar con una
provisión de reserva suficiente respecto de las necesidades especiales
de menores, personas de avanzada edad, o aquellas otras con dolencias
crónicas (cosas como antialérgicos específicos, inhaladores para asma de
reserva, medicación para la diabetes, hipertensión, etc).
Instrumental básico como un termómetro de galio (ni mercurio, ni
electrónico), tijeras pequeñas, gotero para dosificación, guantes
esterilizados desechables o pequeñas pinzas para extracción, son otros
elementos de utilidad.
7- Manual técnico en papel.
Contar con un manual en papel guardado en bolsa hermética, con
técnicas básicas de orientación, acampada, técnicas de potabilización
auxiliar, nociones de primeros auxilios, etc, como el manual "Wiseman"
adoptado por protección civil y fuerzas armadas en varios países del
mundo y que se puede comprar en la FNAC y otras librerías, o en su
defecto un sencillo manual Scout u otros similares.
8-Medios de higiene personal.
Contar con una reserva de medios de higiene personal y limpieza en el
lugar de reagrupación así como un pañuelo extra de tela (larga duración
a diferencia de toallitas húmedas/clinex), una esponja por persona (en
especial para limpieza humedecida si hay poca agua), papel wc, jabón de
glicerina, lejía (de la expresamente apta también para potabilización
según etiquetado como medio auxiliar), friegaplatos y elementos
sustitutivos de las compresas femeninas (como el "Mooncup" y otros
disponibles en el mercado); Es importante prestar una especial atención a
una cantidad suficiente de pañales en caso de contarse en el grupo con
niños de corta edad. Fundamental contar con medios suficientes de
higiene dental que no pueden faltar, y de desparasitación ante piojos.
También es necesario atender a la desparasitación oral y collar de repuesto para nuestras mascotas.
9- Varios útiles de alto valor en emergencias (cerillas, transistor, navaja multiusos, linterna y otros).
Contar con algunas otras pequeñas herramientas útiles, desde medios
de encendido (como 3 o 4 paquetes de cajas de cerillas pequeñas de las
normales y baratas, repartidas en bolsas herméticas lo que, por un par
de euros, nos garantizará numerosos encendidos sencillos por unos gramos
de peso, que habrán de ser manejados siempre con la debida prudencia), a
una simple linterna, o un sencillo transistor - mejor si ambas usan la
misma pila (recargable) y tenemos, además, reserva extra y un cargador
de pilas solar que les dé servicio - disponible a precio económico y en
varios modelos en el mercado -; monocular para avistar y pequeña
brújula, una pequeña navaja multiusos (con función de abre latas), un
silbato para hacer señales. Parches y bombín para la bicicleta.
Distintos elementos para pequeñas confecciones: Cinta americana,
plástico cubretodo como el que se usa para pintar una habitación; bolsas
de basura y un simple tubo de pequeño diámetro de un metro pueden ser
muy polivalentes; bridas y cordel resistentes; herramientas de bricolaje
de las que habitualmente se tienen en casa como alicates o
destornillador.
Que no se olvide importante incluir lápiz y papel para cualquier
posible anotación o mensaje. Una baraja de cartas, ajedrez/damas de
bolsillo, pelota de tenis o algún pequeño elemento similar no ocupa
lugar, en especial si hay niños y mascotas.
10-Chapas personales, dinero efectivo y documentación.
Llevar consigo fotocopia en bolsa con cierre hermético de la
documentación personal y familiar más esencial: documentos de identidad y
pasaporte, libro de familia, cartilla médica, veterinaria, fotografías,
pólizas de seguro, estractos bancarios y escrituras de propiedad, así
como algo de dinero en efectivo ya que sería probable que los cajeros no
funcionasen o se pudiesen ver desbordados.
Es además recomendable que todos los miembros del grupo porten algún
tipo de identificación personal (colgante/pulsera) con su nombre y
apellidos, su grupo sanguíneo, posibles alergias médicas y alimenticias -
de existir - u otras enfermedades crónicas, así como datos de contacto
hacia otros miembros del grupo, muy en particular los niños.
Fuente.